Argentina – P.N. de los Esteros del Iberá

Coordenadas: -28.53789, -57.18648

 

La reserva provincial del Iberá es una zona protegida del interior de los amplios Esteros del Iberá, en el nordeste de Argentina. Se compone de pantanos, ciénagas y lagunas que se extienden al sudoeste desde la ciudad de Ituzaingó hasta el municipio de Chavarría. Junto a la laguna del Iberá se encuentra el pueblo Colonia Carlos Pellegrini, popular base para visitar la zona. La reserva alberga una gran diversidad de fauna silvestre, como caimanes, ciervos de los pantanos y cientos de especies de aves. 

La reserva provincial del Iberá es una zona protegida del interior de los amplios Esteros del Iberá, en el nordeste de Argentina. Se compone de pantanos, ciénagas y lagunas que se extienden al sudoeste desde la ciudad de Ituzaingó hasta el municipio de Chavarría. Junto a la laguna del Iberá se encuentra el pueblo Colonia Carlos Pellegrini, popular base para visitar la zona. La reserva alberga una gran diversidad de fauna silvestre, como caimanes, ciervos de los pantanos y cientos de especies de aves. Esta reserva se incluye dentro de Los Esteros del Iberá un extenso humedal que abarca unos 12 000 km2, en la provincia de Corrientes, en el nordeste de Argentina. Solo superado en extensión por el Pantanal (brasileño, boliviano y paraguayo) con el cual forman el segundo humedal más grande del mundo, parte de un sistema hidrográfico mucho más extenso: el macrosistema del Iberá, de cerca de 45 000 km2 (como la extensión de Extremadura en España), en el que se desarrolla un ecosistema subtropical y tropical de enorme diversidad.

El centro aproximado de este sistema se ubica en las coordenadas 28°36′00″S 57°49′0″O.

En Argentina ocupa unos 12 000 km², que forman parte de un sistema mucho más extenso cuya superficie se estima en alrededor de 45 000 km².2

Debido a su peculiar geografía y difícil acceso, la zona cuenta con una rica y variada población animal. La fauna autóctona incluye numerosas especies amenazadas para las cuales este es uno de los últimos hábitats remanentes; entre ellas, el ciervo de los pantanos (Blastoceros dichotomous), el venado de las pampas (Ozotocerus bezoarticus), el carpincho (Hydrochoerus hydrochaeris), el lobo de crin o aguará guazú (Chrysocyon brachiurus), el yacaré overo (Caiman latirostris) y negro (Caiman yacare), la boa curiyú (Eunectes notaeus) y el lobito de río (Lontra longicaudis), los monos aulladores (o carayás), así como una enorme variedad de aves como el pirincho entre tantas muchas aves. La ictiofauna también es muy variada y abundante, sobresaliendo los dorados, armados, surubíes, pacúes, mojarras, tarariras y palometas. Los yaguaretés parecen haber sido extinguidos en esta zona durante la primera mitad del siglo XX, al igual que el tapir, el lobo gargantilla, el pecarí de collar y el oso hormiguero; este último reintroducido recientemente. La exuberante flora local incluye numerosas especies acuáticas como el camalote, y amapolas de agua —que dan lugar al fenómeno de los embalsados, auténticas islas flotantes que complican la geografía de las lagunas— además de extensos pirizales.

Centro de Interpretación de los Esteros del Iberá – Colonia Pellegrini

Una ruta de acceso al Iberá; notar la tierra roja en el suelo despejado de vegetación.

El Centro de Interpretación Iberá se encuentra a orillas de la laguna Iberá, la segunda laguna más grande de los esteros del Iberá, en el pueblo de Colonia Carlos Pellegrini, la mejor base para la exploración del parque. El acceso se puede realizar desde la ciudad de Mercedes, de la que lo separan unos 120 km de carretera sin pavimentar (actualmente se está construyendo el pavimento de los primeros 40 km).

El centro cuenta con un salón de exposiciones con material ilustrativo acerca de la historia, geografía y biología del parque. Desde allí parten senderos a través del monte y orillando la laguna para observar la flora y fauna. Es recomendable contar con un guía, que se puede contratar en el mismo lugar, puesto que los hábitos y horarios de las especies locales las hacen difíciles de avistar por el aficionado.

Sin embargo, la mejor opción para conocer la laguna es contratar en Colonia Pellegrini un paseo acuático. Bajo la guía de un conocedor, el recorrido permite observar las especies más tímidas, así como las aves y plantas acuáticas, y caminar sobre los embalsados. La navegación nocturna ofrece la posibilidad de avistar animales que durante el día se esconden de los rigores del sol.

Para el visitante, el invierno presenta el mejor momento para acceder al parque. Aunque la flora no muestre el esplendor de la primavera, las molestias ocasionadas por los insectos son mucho menores. Durante el verano, además, las horas de mediodía son impracticables por la intensidad del calor.

Enlaces externos:

www.parqueibera.gob.ar